Últimamente vengo observando los emails que me llegan de blogs, cursos, conferencias… Y, debe ser deformación profesional, me encuentro de forma repetitiva los mismos errores. Es por ello que me he decidido a escribir este artículo.
Estos errores más comunes son:
- No personalizar el email de bienvenida.
- Incluir imágenes sin enlace a la Web.
- No destacar el CTA (Call To Action).
- No implementar el seguimiento de enlaces. o hacer una implementación automática.
- No autentificar el servidor de envío de la plataforma externa.
No personalizar el email de bienvenida.
Todas las plataformas de email marketing (Mailchimp, Acumba Mail…), nos permiten automatizar los envíos de email de bienvenida, es decir, el primer email que recibe nuestro nuevo subscriptor. En muchos casos, me encuentro que cuando me suscribo, recibo el mismo email con la misma maquetación y el mismo mensaje, el mensaje por defecto que genera la plataforma.
¿Por qué es un error?. Primero por imagen. Si alguien monta un sistema de envío de email marketing, y no se preocupa lo más mínimo por el contenido el primer email que me envía, puedo pensar que lo que me encuentre después sea de baja calidad. Y segundo, se está perdiendo una oportunidad de oro para notificar a los suscriptores que nos agreguen a su lista de usuarios de confianza o que revisen su categoría de promociones por si nuestro email estuviera ahí, como ocurre con Gmail.
Al final, puede ocurrir que después de subscribirse, nuestro usuario no vea ninguno de nuestros correos debido a que este acabe en spam o en promociones.
Incluir imágenes sin enlace a la Web.
Cuando se incluye una imagen, por lo general se suele pinchar en ella, esperando que lleve al contenido en la Web. Si en vez de enlazar esta imagen a la página de nuestra Web a la que deseamos que vayan, la ponemos “tal cual” y no hacemos nada más, cuando quien reciba nuestro email pinche sobre ella, se le abrirá la misma en una nueva ventana, cuando no en la misma del email que sería peor, del navegador. En un cliente con el que trabajo solemos poner el mismo enlace en la imagen y en un botón tras el texto, los clics en la imagen reportan un 20% de las visitas a su Web.
No destacar el CTA (Call To Action).
Otro error, no destacar el CTA, la llamada a la acción.
Cuando enviamos un email a personas interesadas en nuestro producto o servicio, esperamos que hagan algo, leer nuestro artículo, solicitar más información sobre nuestros servicios, comprar un producto…. Si no destacamos esa acción, mermamos las posibilidades de que ocurra.
No implementar el seguimiento de enlaces (O hacer una implementación automática).
En algunos casos, me he encontrado con emails en los que los enlaces estan puestos tal cual, es decir, sin etiquetar,
Si queremos medir el impacto de la campaña en la herramienta de analítica Web, necesitamos implementar el seguimiento de los enlaces mediante el etiquetado de los mismos. Podemos hacerlo de dos formas: Automatizando este seguimiento desde la herramienta o manualmente.
Si automatizamos, al menos en Mailchimp, nos encontraremos con dos problemas:
a – Hay que cuidar mucho el nombre que le damos a la campaña (sin acentos, ni eñes, ni nada de eso) y además sólo podremos rastrear campaña, medio y fuente, que en este último caso será el nombre de la lista, no un posible segmento de la misma.
b.- Cuando alguien pinche sobre el clásico enlace de “Si no puede ver correctamente este email, pinche aquí” y le lleve a la versión Web de nuestra Newsletter se perderá completamente el etiquetado, y las visitas que recibamos desde la versión Web, se guardarán como referencias de una Web externa, no como visitas que provienen de una campaña de email.
Sin embargo, si lo hacemos de forma manual, creando los enlaces etiquetados desde una herramienta como Google Analytics Campaing Tagging Tool, podremos controlar qué datos queremos enviar a nuestra herramienta de analítica, incluso definir a qué segmento de nuestra lista le estamos enviando dicho email. Y este etiquetado se trasladará a la versión Web de la Newsletter.
No autentificar el servidor de envío de la plataforma externa.
Por último, me he encontrado muchos casos en los que en la cabecera del email, en el campo del remitente, además del nombre a mostrar del remitente y su email, un “a través de….”, que no es más que el servidor de la plataforma que hemos elegido para hacer los envíos, y esto nos puede generar algún problema, como por ejemplo que nuestro email acabe en la carpeta de Spam.
La solución para este caso es autentificar el servidor de envío ante Google, Hotmail … y esto se logra añadiendo unas entradas al DNS de nuestro servidor de correo que digan a los servicios de email que el servidor de nuestra plataforma de envíos está autorizada para enviar emails en nuestro nombre. De esta forma, cuando enviamos una newsletter, en el remitente aparecerá únicamente nuestro nombre y nuestra dirección de correo.
Resumiendo, cinco son los cambios que debemos realizar a la hora de implementar y enviar nuestros emails: Personalizar el email de bienvenida, configurar las imágenes para que tengan enlace a la Web, destacar el CTA, implementar el seguimiento de enlaces y autentificar el servidor de envío de la plataforma externa. De esta forma, optimizaremos que estos lleguen de forma correcta y que podamos analizar cuál es el impacto que tienen en nuestros resultados.
Y vosotros, ¿Qué otros errores habéis detectado cuando os envían una Newsletter?
Imagen destacada Credit Ramonhernandez1720 http://nachobenavides.com/diseno-web-almeria